CANTABRIA ANTIGUA (I) El poeta Silo Itálico, situando en un bélico tiempo la colosal figura de 'un cántabro llamado Laro' (LA GUERRA PÚNICA, XIV, 45-67) que pelea como es costumbre de su pueblo con un hacha de doble filo, elogiará las cualidades y el dinamismo de esta gente:
'El cántabro, invencible ante el frío, el calor y el hambre, se lleva antes que nadie la palma en toda clase de trabajos. ¡Admirable amor a su pueblo! Cuando la inútil edad senil comienza a encanecerle pone fin a sus años, ya no aptos para la guerra, envenenándose con el tejo. Para él es imposible vivir sin la guerra, pues toda la razón de su vida la pone en sus armas, considerando un castigo vivir para la paz.' SILIO ITÁLICO, La guerra púnica, II, 326-331)